martes, 28 de octubre de 2008

RE: [AW] Construcción del miedo y otras

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Date: Tue, 28 Oct 2008 19:15:03 -0300
To: agenciawalsh@listas.nodo50.org
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Subject: [AW] Construcción del miedo y otras

AGENCIA DE COMUNICACIÓN RODOLFO WALSH

Integrante de la Red Nacional De Medios Alternativos

 

 

Martes, 28 de octubre de 2008

 

Construcción del miedo

 

(AW) La siguiente nota fue reproducida ya hace un tiempo por la Agencia Rodolfo Walsh. Creemos importante, sin embargo, volver a publicarla porque mantiene absoluta vigencia. Sobre todo en estas horas en que se vive una nueva escalada fascista, alentada desde los grandes medios de comunicación masiva, tendiente a "domesticar" mediante el miedo y a trasladar la responsabilidad de la inseguridad con que se vive diariamente a sus víctimas. No confundir los verdaderos responsables son los de siempre: los dueños de todo en este país y su brazo armado, las fuerzas de seguridad. Todos los demás somos víctimas. La claridad con que Hernán López Echagüe se explaya sobre el tema es irremplazable.

 

 

Brian, condena mediática antes del juicio, por villero

 

(AW) Brian está acusado del asesinato del ingeniero Barrenechea. Brian es un alumno de la ESB N º 141 de La Matanza. Los medios del poder y la campaña fascista sedienta de sangre pobre ya lo condenaron. Nelly Edith Baldano docente de la escuela difundió un correo en donde, consternada, defiende a su alumno y explica que el único delito de Brian es el de vivir en una villa, ser pobre, y tener la piel no tan blanca. "Si a Barrenechea lo mató la sensación de inseguridad, a Brian lo está matando el sistema punitivo" sintetiza con justeza Nelly en su mensaje. 

 

 

Rosario: el crimen de Sandra Cabrera continúa impune

 

(AW) La Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina (AMMAR) realizó ayer en Rosario la Jornada "Justicia por Sandra Cabrera". Denunciaron que la investigación judicial del asesinato de Sandra, no siguió las pistas que vinculan a dueños de boliches con policías federales y provinciales. Tampoco se pidieron explicaciones a quien decidió quitarle la custodia días antes de su asesinato, pese a las 18 amenazas de muerte que había recibido la dirigente de AMMAR Rosario entre octubre de 2003 y enero de 2004.

 

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Construcción del miedo

 

(AW) La siguiente nota fue reproducida ya hace un tiempo por la Agencia Rodolfo Walsh. Creemos importante, sin embargo, volver a publicarla porque mantiene absoluta vigencia. Sobre todo en estas horas en que se vive una nueva escalada fascista, alentada desde los grandes medios de comunicación masiva, tendiente a "domesticar" mediante el miedo y a trasladar la responsabilidad de la inseguridad con que se vive diariamente a sus víctimas. No confundir los verdaderos responsables son los de siempre: los dueños de todo en este país y su brazo armado, las fuerzas de seguridad. Todos los demás somos víctimas. La claridad con que Hernán López Echagüe se explaya sobre el tema es irremplazable.

 

 

Hernan Lopez Echague

6 de agosto de 2004

 

No piense. No experimente sensaciones. No pregunte. No responda. No discuta. No caiga en la tontería de la incertidumbre. No beba. No fume. No juegue. No haga el amor. No crea en su hijo. Tampoco en su hermano. No escuche. No opine. No vote pavadas. No pida, y, desde luego, menos aún exija. No atienda el teléfono. No llame. No desee. No mire. No interprete. No cometa el desliz imperdonable de apasionarse por una idea. No exprese solidaridad. No crea en su amigo. Tampoco en sus padres. No abrace. No distinga. No analice. No juzgue. No duerma tranquilo. No confíe. Si oye ruidos raros en su casa, salte de la cama, tome la escopeta y dispare en defensa propia. No abra la puerta. No extienda la mano. No ayude. No colabore. No bese. No cante. No sonría. Busque otra vereda cuando en la suya, a lo lejos, advierta un grupo de gente extraña, oscura. No goce ni padezca la vida.

 

Cierre la boca y obedezca, simplemente obedezca, y escuche la radio y lea los periódicos y, por sobre todas las cosas, no se aparte siquiera un instante de la pantalla del televisor.

 

En momento alguno incurra en la irresponsabilidad de asomar la cabeza por la ventana de su casa. Y escriba de prisa su testamento. ¿O es que todavía no ha caído en la cuenta de que nuestro cristiano y occidental modo de vida está en peligro? Cualquier paso torcido puede conducirnos a una tragedia impensada. El mundo se ha convertido en un inabarcable terreno destinado a la caza, mayor y menor, y nosotros, personas comunes y ordinarias, sumergidos en una ingenuidad sin límite, somos la presa codiciada. Las rutas, calles y avenidas del mundo están repletas de cazadores furtivos. De todo tipo y humor. Patotas de jóvenes drogados y locos dispuestos a arrancarnos todo: ropa, dinero, inocencia. Árabes rabiosos que sin contemplación alguna nos decapitarán. Hordas de trabajadores desocupados y familias sin techo que no hacen otra cosa que aguardar nuestro sueño para invadir nuestra casa y llevárselo todo.

 

Campesinos arropados de cordero que no tienen otro propósito que hacerse de nuestras tierras. Niños que, navaja en mano, aleccionados por sus padres, claro, nos esperan a la vuelta para abrirnos el vientre. En otras palabras, gente sucia, malvada y pecaminosa que no piensa más que en cagarnos la vida.

 

De modo tal que todo está bien así como está. Quietud, silencio, encierro, aislamiento, desdén. La existencia, condenada a balbucear entre cuatro paredes.

Alguien, alguna vez, llamó sometimiento a esta situación. Someterse. Acomodarse a una realidad fraguada que anula nuestros deseos e incluso ignora nuestras necesidades básicas, pero que por razones muy complejas, diríase que culturales y atávicas, aceptamos como orden natural, preestablecido e inviolable. Someter: subordinar la voluntad o el juicio propios a los de otra persona o grupo.

Inculcar y propagar el temor en una sociedad, es acaso el modo más sutil y certero para mantener un estado de sometimiento que, en más de una ocasión, se asemeja a la esclavitud. Porque uno, de pronto, apenas piensa en escapar solo y a las corridas entre el maizal. Y no hay mejor bocado para el poder político y económico que la soledad, el individualismo, ponerse a responder solo y a las patadas. El temor, cuando está fundado en un recelo generalizado, crea solidaridades efímeras y echa por tierra la solidaridad franca y duradera. Todo es desconfianza. Bush apeló a la propagación del miedo entre los norteamericanos -tan proclives a caer en el pánico, dicho sea de paso- para entregarse alegremente a la matanza de miles de iraquíes con el único y excluyente propósito de robar petróleo. Pero, ¿cómo logró el poder político de los Estados Unidos llevar a ojos y oídos de la población esa paralizadora sensación de terror? Los grandes medios de comunicación actuaron de puente.

 

Los grandes medios de comunicación siempre actúan de puente entre el poder y la sociedad, cuando no de voceros. Y la conducen según sus antojos. La razón es sencilla. Son empresas, enormes en muchos casos, que responden a una serie de intereses ideológicos y comerciales que habitualmente poco tienen que ver con la búsqueda de una sociedad mejor. Existe una clara afinidad, en oportunidades familiar y generalmente ideológica, entre la clase social que dispone de los medios de producción material y la que dispone de los medios de producción intelectual. Una sociedad de hecho.

 

Dos jóvenes roban tres chorizos en una carnicería; a una señora le arrancan la cartera; violan a una joven. Los diarios titulan: "Escalada de violencia". Y en cada esquina comienzan a hablar de la escalada de violencia. "Así no se puede vivir". "Queremos orden". "Para eso pagamos nuestros impuestos". "Los meten presos por una puerta y los sacan por otra".

Entonces, los grandes medios de comunicación resuelven auscultar el ánimo de la gente. Una encuesta de tono inductivo: "¿Tiene miedo?". Por supuesto que lo tengo, si he visto al carnicero putear y a la señora y a la madre de la joven llorar. Los medios difunden el resultado: "El 78 por ciento de la población tiene miedo".

 

Los desocupados marchan por las calles exigiendo pan y trabajo. Los diarios titulan: "El centro de la ciudad fue un caos", y en la nota editorial se preguntan: "¿Hasta cuando?". La gente, entonces, absorbe y dice por todas partes: "Queremos orden". "La libertad de uno termina donde comienza la del otro". "Es inconcebible". Los medios hacen la encuesta: "¿Qué opina de las manifestaciones que entorpecen el tránsito?". El 75 por ciento las rechaza. A la mañana siguiente, los medios informan: "La gente está harta de esta situación, lo dicen las encuestas".

 

Así las cosas, el miedo que los propios medios de comunicación crearon y propagaron, cobra un irrefutable aire de legitimidad. Porque "es la gente" la que está harta. Una realidad engañosa que cumple su cometido: sumergir a la sociedad en la quietud, en la ausencia de participación, en la desconfianza.

La noticia se ha convertido en mercancía, y el miedo es una etiqueta que vende. Fascinados por la forma, por el amarillismo, los grandes medios han hecho a un lado el fondo de la cuestión.

 

Ignacio Ramonet, director de Le Monde Diplomatique, escribió años atrás: "Basta con que un hecho sea lanzado desde la televisión -a partir de una noticia o imagen de agencia- y repetido por la prensa escrita y la radio, para que el mismo sea acreditado como verdadero sin mayores exigencias. Y como en la actualidad los medios funcionan entrelazados, de forma que se repiten e imitan entre ellos, es frecuente la confirmación por parte de un medio de la noticia que éste mismo lanzó a partir de la reproducción de la misma en otro medio, que simplemente la "levantó" del primero (...). Los medios se autoestimulan de esta forma, se sobreexcitan unos a otros, multiplican la emulación y se dejan arrastrar en una especie de espiral vertiginosa, enervante, desde la sobreinformación hasta la náusea. De esta forma, podemos recordar, se construyeron las mentiras de la Guerra del Golfo. ¿Qué medios tiene el ciudadano para averiguar si se falsea la realidad?".

Esta semana, en una vieja edición de la revista dominical del diario El País, de Madrid, leí un excelente artículo de Javier Cercas titulado "Fuera es feo". Refiere Cercas el curioso mandamiento que gobierna al matrimonio conformado por el director de cine Arturo Ripstein y la guionista Paz Alicia Garciadiego: en su hogar no admiten la presencia de la televisión, tampoco radio, y mucho menos espacio para diarios o revistas. Una manera práctica de protegerse de las toneladas de basura y calamidades que, en apenas minutos, es capaz de arrojar sobre nuestra cabeza un programa de tv en apariencia inofensivo o un editorial de La Nación, por ejemplo.

 

Me atrevo a discrepar con el matrimonio Ripstein-Garciadiego. Fuera es más lindo, y tampoco es necesario hacer gala de una inquebrantable valentía para salir, caminar, saludar, abrazar, mirar, escuchar, socializar, solidarizarse, beber, amar, decir, creer, compartir y, por sobre todas las cosas, cambiar: reunirse con el desfachatado objetivo de cambiar este lastimoso estado de las cosas donde priman el miedo y la indiferencia.

 

Suficiente sería comprender la sensata máxima del subcomandante Marcos: "Un valiente es un cobarde que corre hacia adelante".

 

AGENCIA DE COMUNICACIÓN  RODOLFO WALSH

 

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Brian, condena mediática antes del juicio, por villero

 

(AW) Brian está acusado del asesinato del ingeniero Barrenechea. Brian es un alumno de la ESB N º 141 de La Matanza. Los medios del poder y la campaña fascista sedienta de sangre pobre ya lo condenaron. Nelly Edith Baldano docente de la escuela difundió un correo en donde, consternada, defiende a su alumno y explica que el único delito de Brian es el de vivir en una villa, ser pobre, y tener la piel no tan blanca. "Si a Barrenechea lo mató la sensación de inseguridad, a Brian lo está matando el sistema punitivo" sintetiza con justeza Nelly en su mensaje. 

 

 

 

Buenos Aires, 24 de octubre de 2008.- Brian es un alumno de la ESB N º 141 de La Matanza que funciona en el edificio de la EPB N º 162.

 

Yo trabajo en esa escuela y lo conozco tanto a él como a sus hermanos.

 

Como docentes del establecimiento estamos dolidos por su detención porque lo conocemos lo bastante como para no creer en la veracidad de esta imputación, y como para salir a brindar un testimonio positivo sobre todo lo que un docente puede apreciar durante los años de haber compartido una parte considerable de sus días.

 

El único fin de este e mail es dar a conocer la otra cara de esta situación para que la justicia trabaje, al menos una vez, en serio, que evite arruinar la vida de un menor innecesariamente, y que no se realicen mas detenciones al voleo porque de eso nuestro país ya tuvo bastante. 

 

Si a Barrenechea lo mató la sensación de inseguridad, a Brian lo está matando el sistema punitivo. 

 

Cuando la brecha entre la justicia y la injusticia se reduce a una cuestión semántica

 

A través de un largo tiempo de estudios superiores en cuestiones criminales he podido observar que el sistema punitivo, con una frecuencia del todo lamentable, echa manos a recursos non sanctos para sostener una apariencia de justicia.

 

Es así que cuando ocurre algún crimen sangriento que impulsa a la protesta social, el sistema punitivo, ante los clamores de justicia, sale a buscar a un asesino. Y en este buscar a un asesino es donde subyace la cuestión semántica.

 

Lo que exigimos, como pueblo, a nuestros gobernantes es que se encuentre al asesino. Sin embargo, el sistema, presionado por los medios de comunicación, lo resuelve encontrando "a un asesino", y no "al asesino".

 

Es claro que ante una mirada superficial y genérica de la cuestión, este detalle aparece imperceptible. Pero si se profundiza, es sencillamente aterrador.

 

Así es que, en los últimos días, a causa del asesinato del ingeniero Barrenechea, y la consecuente presión popular y mediática, el Estado se hizo presente, allanó el barrio "Puerta de Hierro", y se llevó "a un asesino".

 

No puedo explicar mi consternación, y la de otros compañeros docentes, al enterarnos que "el asesino", como han dado en llamarlo los medios (ignorando la cuota semántica), es un alumno de nuestra escuela, y hermano de otros alumnos de nuestra escuela. Un alumno inteligente, capaz, eficiente, confiable, que no ha exteriorizado ni más ni menos problemas de conducta que las travesuras propias y generales de su edad. Un alumno que ha transcurrido su historia educativa en un establecimiento y del cual los docentes tenemos un excelente concepto.

 

No existen palabras para expresar nuestra indignación y tristeza, porque no desconocemos como funcionan los sistemas en nuestro país, y porque sabemos que Brian goza de los atributos necesarios para ser estigmatizado, porque vive en una villa, porque es pobre, porque su piel no es tan blanca. Y porque sabemos que nadie está supervisando las pericias que posiblemente sirvieran para incriminarlo porque la familia no dispone de los medios económicos necesarios.

 

Y más aún. Esta acusación absurda no podrá ser sostenida eternamente, pero si se la puede entretener durante los tres o cuatro años necesarios para llegar al juicio oral. Y entonces, del mismo modo que cuando dijeron que se llevaron al asesino, en realidad se llevaron a un niño al que etiquetaron como asesino, nos devolverán a la sociedad, un Brain que ya no será el Brian que se llevaron y que nunca jamás podrá volver a resolver los problemas y superar los obstáculos con su amplia sonrisa y su mirada franca.

 

Desde cualquier postura, sea garantista, abolicionista, o represiva, todos coincidimos en que debe detenerse al asesino y no inventar un asesino para calmar clamores. Porque si a Barrenechea lo mató la sensación de inseguridad, a Brian lo convirtió en asesino la justicia.

 

Es mi deseo que nuestro sistema punitivo se ilumine, disponga la inmediata libertad de Brian, y comience a trabajar con seriedad y responsabilidad de una vez por todas.

 

 

 

Dra. Nelly Edith Baldano

 

Docente EGB 162 La Matanza

 

Abogada CAM to VII fo 80- CPACF to 41 fo 738

 

Licenciada en Sociología

 

Posgr: Especialista en Investigación Científica del Delito

 

Drando en Derecho Penal y Criminología

 

 

AGENCIA DE COMUNICACION RODOLFO WALSH

 

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Rosario: el crimen de Sandra Cabrera continúa impune

 

(AW) La Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina (AMMAR) realizó ayer en Rosario la Jornada "Justicia por Sandra Cabrera". Denunciaron que la investigación judicial del asesinato de Sandra, no siguió las pistas que vinculan a dueños de boliches con policías federales y provinciales. Tampoco se pidieron explicaciones a quien decidió quitarle la custodia días antes de su asesinato, pese a las 18 amenazas de muerte que había recibido la dirigente de AMMAR Rosario entre octubre de 2003 y enero de 2004.

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Rosario, 27 de octubre de 2008 (AMMAR).-  "Decidimos poner a la luz de toda la sociedad los expedientes del crimen de Sandra Cabrera porque son una prueba de la impunidad: las principales líneas de investigación que revelan la complicidad entre dueños de boliches y policías no son seguidas para investigar el asesinato de la secretaria general de AMMAR Rosario", afirmó hoy Elena Reynaga, secretaria general de la Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina (AMMAR) a nivel nacional al presentar la jornada "Justicia por Sandra Cabrera", en la cual se distribuyó a los presentes una síntesis de los once cuerpos de la causa, en el Salón Dorrego de la Sede de la Gobernación de Santa Fe.

 

Además, durante el encuentro se presentó el primer registro de crímenes contra trabajadoras sexuales, que revela que hay 27 mujeres asesinadas en los últimos doce años todas bajo un mismo patrón: persecución policial, pedidos de coimas, torturas y muerte. Todos los crímenes continúan impunes (ver adjunto).

 

La presentación de la Relectura crítica de la investigación judicial estuvo a cargo del periodista Carlos del Frade, autor del análisis: "La causa por el crimen de Sandra Cabrera está paralizada porque no logran que cierre la hipótesis de crimen pasional, que es la única que al poder Judicial de Rosario le interesó seguir todos estos años", aseveró. Sandra Cabrera fue asesinada de un balazo en la nuca el 27 de enero de 2004 luego de lograr, con sus denuncias, que se remueva a la cúpula de Moralidad Pública de la policía de Rosario, que venía amenazando y pidiendo coimas a las trabajadoras sexuales en forma sistemática.

 

El único procesado, el policía Diego Parvluzik fue sobreseído hace un año y la causa está paralizada.

 

"Las amenazas no terminaron, las coimas tampoco", aseveró a su turno Claudia Lucero, secretaria general de AMMAR Rosario. Y explicó que la herramienta de la policía para perseguirlas es la vigencia del Código de Faltas que criminaliza el trabajo sexual. 

 

"El de Sandra Cabrera fue un crimen político, porque era una dirigente social que integraba una Central de Trabajadores y fue asesinada por las denuncias que hacía por las condiciones de vida y de trabajo", afirmó Victorio Paulón, integrante de la Mesa Nacional de la CTA.

 

Durante la jornada, además de denunciarse las líneas que no se siguieron en la investigación del crimen de Sandra Cabrera (ver adjunto), se lanzó una campaña nacional de firmas por justicia y derogación de los códigos contravencionales y se presentarán una serie de cuatro "Postales de la Impunidad", donde a través de cuatro imágenes y cuatro textos se denuncia la impunidad que rodea al asesinato de la secretaria general de ammar Rosario.

 

Las planillas para firmar por Justicia para Sandra Cabrera están disponibles en todas las sedes de la CTA del país y también se reciben adhesiones por email a: sandracabrera@ammar.org.ar

 

Contactos para la Prensa:

Claudia Lucero, secretaria general AMMAR Rosario: (0341) 1563 79022

Elena Reynaga, secretaria general AMMAR Nacional: (011) 1544212201

Jorgelina Sosa, secretaria general adjunta a nivel nacional: (011) 15 5762 6265   

 

PRENSA: Eva Amorín (011) 15 6969 5155 / Agustín Garone (011) 15 5929 8000

 

comunicación@ammar.org.ar / www.ammar.org.ar

 

 

AGENCIA DE COMUNICACION RODOLFO WALSH

 

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